Especie Formica propinqua (Creighton, 1940)

Las obreras se reconocen por la distribución de los pelos erectos. Los ángulos laterales posteriores y los escapos no tienen ninguno (excepto en el ápice del escapo), las superficies dorsal y ventral de la cabeza tienen varios (al menos 12 en la superficie ventral de la cabeza), el dorso del mesosoma tiene varios pelos erectos cortos y finos (la mayoría < 0,1 mm de longitud), el pecíolo tiene varios pelos similares y el dorso del gaster tiene varios pelos erectos que son ligeramente más largos y algo más ásperos que los del pronoto. La mayoría de las superficies, incluidos el clípeo, la parte inferior de la cabeza y la gena, son opacas o poco brillantes. Las tibias medias y traseras tienen unas pocas cerdas erectas (unas 5 en cada una de las 2 filas paralelas), pero se extienden por toda la longitud de las tibias. (Mackay y Mackay 2002)